El gran bosque de pino canario de Gran Canaria
El Parque Natural de Tamadaba cuenta con un bosque de pinos de una espectacularidad sobresaliente. Las 2.000 hectáreas del pinar de Tamadaba cubren un amplio macizo abrupto y recortado del noroeste de la isla de Gran Canaria, con acceso desde las localidades de Agaete o la Aldea de San Nicolás. Regenerado y repoblado en el siglo XX , hoy en día es uno de los pinares más sanos de Canarias y un apreciado destino de ocio en la naturaleza en Gran Canaria.
Los pinos de Gran Canaria son de una especie peculiar: el pino canario, que es originario de estas islas. Es un árbol alto, simétrico, de color verde ceniciento y resistente a los incendios. A la fresca sombra de los de Tamadaba encontramos plantas fragantes y de flores coloridas, como la jara, el corazoncillo y el tomillo salvaje. Además, sus copas y troncos son hogar de numerosas aves, como los animados pájaros carpinteros y los escasos pero encantadores pinzones azules de Gran Canaria.
Dormir en caseta o caravana en el pinar de Gran Canaria
Una de las actividades en la naturaleza preferidas de los habitantes de Gran Canaria es reunirse a la sombra de los pinares del Parque Natural de Tamadaba. Quizás por ello, una de zonas de acampada y barbacoa más completas y extensas de la isla se encuentra en este pinar situado en las cumbres del noroeste de la isla. Con espacio para 400 personas en casetas o autocaravana, los Llanos de La Mimbre son un punto ideal desde el que explorar este parque natural.
Esta zona de acampada y área recreativa está en el mismo corazón del pinar de Tamadaba, junto a la carretera GC-216, que rodea el pico de La Bandera. Desde las inmediaciones del recinto salen varios senderos de interés, como el que sube al propio pico de La Bandera, o la ruta clásica de San Pedro, de 20 kilómetros, la cual ofrece vistas impresionantes de la población costera de Agaete desde las alturas. Para pernoctar en los Llanos de la Mimbre se debe reservar plaza.
Palmeral y playa salvaje cerca de Agaete
Guayedra es un largo barranco con un bosquete de palmeras canarias que acaba en una playa salvaje de arena negra y callaos. Este rincón poco frecuentado está a solo seis kilómetros de la localidad y el puerto de Agaete, en el noroeste de Gran Canaria. La carretera GC-200 nos deja en el mismo barranco, a 650 metros en sendero de la playa. Aquí acaba el Parque Natural de Tamadaba y empieza un día de desconexión del mundanal ruido.
Desde las espléndidas palmeras de su tramo fina hasta sus almácigos supervivientes de los grandes bosques de antaño, la flora de Guayedra es excepcional. Aquí viven muchas plantas endémicas de Gran Canaria, como la preciosa margarita de Guayedra. Un sendero circular que conecta con Agaete permite disfrutar de toda esta belleza. Y tras el sendero, el visitante puede bañarse en la playa de Guayedra, teniendo cuidado con la corriente y el oleaje.
- Nunca dejes residuos de ningún tipo en el entorno, incluidas las colillas. Los restos de comida contribuyen a la proliferación de roedores y gatos asilvestrados que suponen una grave amenaza para la fauna.
- Respeta a los animales, no los molestes ni los alimentes. Si ves algún ejemplar herido, puedes avisar en el teléfono de emergencias 112. Tampoco arranques flores o plantas.
- No recojas ni te lleves piedras o cualquier otro elemento del medio natural. Tampoco lo modifiques amontonándolas para realizar las tristemente famosas “torres”.
- No camines por espacios no permitidos y respeta la señalización de los senderos. Salirse de los caminos habilitados provoca daños en el entorno y además puede ser peligroso para ti y para quienes te acompañan.
- No enciendas fuego fuera de las zonas permitidas y ten especial cuidado en los meses de verano.
- Procura no alterar la tranquilidad del entorno con ruidos excesivos (música alta, gritos...).