La Palma es una isla familiar en la que cada día es un buen momento para reunirse en familia y disfrutar de un pícnic. Por eso, hay habilitados muchos espacios recreativos con bancos, mesas y zonas para hacer barbacoas. Bien sea en medio del bosque o al lado del mar, estas áreas están abiertas para palmeros y visitantes, siempre y cuando se dejen en el mismo estado en el que se encontraron, ya que toda la isla es Reserva de la Biosfera de la UNESCO.
Naturaleza en familia: la Laguna de Barlovento, El Refugio del Pilar, la Pared Vieja, El Jable
Para pasar un día en familia en medio de la naturaleza, una buena propuesta es el área recreativa de La Laguna de Barlovento, que está situada en un bosque de pinos, en torno a una gran laguna. Además de contar con una zona infantil, el área se encuentra situada en medio de la Red Insular de Senderos, por lo que es posible realizar distintas rutas e incluso acampar o pernoctar en alguna de sus cabañas (previa reserva). En breve contará con el mayor parque para caravanas, totalmente equipado, de la isla.
De similares características son el Refugio del Pilar (El Paso), punto de comienzo de la Ruta de los Volcanes; la Pared Vieja (Breña Baja), ideal para una pequeña ruta en bici; o El Jable (Tijarafe) con opciones para acceder a senderos oficiales.
Bosques de ensueño: el Fayal, San Antonio del Monte y la Montaña de la Breña
En el municipio de Puntagorda se encuentra el área recreativa de El Fayal, un lugar para perderse llevando una manta y extenderla en el suelo para sentir el danzar de las ramas, el canto de los pájaros y esa paz inigualable de la naturaleza. El lugar cuenta con fogones, mesas y bancos, así como una zona infantil, donde los más pequeños podrán descubrir especies como un brezo llamado Erica Arborea que puede alcanzar una altura de 2 a 4 metros. Está al lado, además, el famoso mercadillo del agricultor que se celebra los fines de semana y de la no menos famosa tirolina.
La Montaña de la Breña, en Breña Baja, es uno de los lugares tradicionales a los que acuden las familias locales y se encuentra en la base de la misma montaña desde la que se obtiene una de las vistas panorámicas más espectaculares de la isla al avistarse Breña Alta, Breña Baja (Las Breñas) y Villa de Mazo.
Por último, San Antonio del Monte, en Garafía, no solo posee zonas de recreo habilitadas, sino que a su alrededor se extiende una amplia superficie para acampada, para caravanas y un gran bosque.
Pícnic y fiestas populares: El Pino de la Virgen
En la isla de La Palma las comidas al aire libre son una tradición durante las festividades cuando las familias se reúnen en el área para degustar la comida típica.
El Pino de la Virgen, también en El Paso, es la zona de preferencia para los almuerzos y picnics familiares durante las Fiestas Trienales de la Virgen del Pino, que se celebran cada tres años, especialmente con ocasión de su famosa romería. En pleno monte, rodeada de pinos, se encuentra la ermita.
Rodeados del verdor más absoluto: Los Tilos
En Los Tilos, en San Andrés y Sauces, también se puede disfrutar de un pícnic encantador en medio de la laurisilva y bebiendo agua pura.
Al lado del mar: Charco Verde, Puntalarga, Puerto Paja
Si lo que se prefiere es una comida marítima, la playa del Charco Verde, en Los Llanos de Aridane, posee una gran extensión de arena negra con varios bancos y mesas de madera para pasar el día entero. Hay duchas para quitarse el agua salada y un quiosco para necesidades de última hora.
Puntalarga, en Fuencaliente, con una playa de callado en la que darse un buen chapuzón para subir luego a disfrutar de una agradable comida.
Puerto Paja, en Puntallana, con una preciosa piscina natural es otra bonita zona al lado del mar.
Ya sea en la montaña o en alguna playa de la costa palmera, grandes y pequeños disfrutarán de una experiencia inolvidable en medio de la naturaleza. Con vistas a animales como vacas o excursiones a caballo, su estancia siempre será divertida.