Las Islas Canarias son el destino ideal para renovarse por dentro y por fuera en unas condiciones excepcionales. Además de una amplia oferta en centros wellness, las islas cuentan con cuatro recursos naturales de uso terapéutico que las convierten en un auténtico spa al aire libre: el agua, el aire, el sol y la arena.
La explosiva naturaleza de las islas y su larga experiencia en el turismo de bienestar hacen de ellas el lugar perfecto para recargar las energías, al poder combinar el relax con unas inolvidables vacaciones.
El sol y la vitamina D
La vitamina D ayuda a absorber el calcio y a prevenir enfermedades como la osteoporosis, la hipertensión o los dolores musculares. Está demostrado que el cuerpo genera vitamina D después de exponerse a la luz solar, y por eso las Islas Canarias, donde las precipitaciones son escasas y abundan las horas de sol, son el lugar perfecto para estar de buen humor, alegre y ‘vitaminado’.
Agua salada: hidratación para la piel
El agua marina, y especialmente la del Atlántico, contiene 89 elementos presentes en nuestro organismo, además de vitaminas y microorganismos que liberan sustancias antimicrobianas y hormonales que la piel puede absorber para beneficiarse de ellas. Bañarse en el mar mejora los problemas cutáneos como el acné, la dermatitis y las heridas, y ayuda a eliminar toxinas y a relajarse.
Fuerza del viento para recargar energías
La brisa marina que llega a las costas canarias está cargada de sales minerales e iones negativos con efectos relajantes y detox, lo que hace que sea muy beneficiosa para el sistema respiratorio y para la nutrición e hidratación de la piel.
Arena como exfoliante
La arena de la playa está impregnada de la sal marina, por eso es uno de los activos que más se usa en los tratamientos de muchos centros wellness. La arena, caliente por el sol, es beneficiosa contra el reumatismo, la artritis y las neuralgias, además de ser un excelente exfoliante natural y la mejor superficie para caminar, activar la circulación y ejercitar las piernas.
Centros wellness en las Islas Canarias
A lo largo de todo el archipiélago existe una amplia oferta de centros wellness con las últimas innovaciones en tratamientos y un trato profesional y cercano que los convierte en referentes de salud y descanso. Muchos de ellos aprovechan los recursos de la naturaleza de las islas en sus terapias, junto a otras técnicas alternativas para ofrecer el máximo bienestar en sus tratamientos.
Cuatro tratamientos revitalizantes, con elementos naturales de las Islas Canarias.
Geoterapia
Las tierras volcánicas de las Islas Canarias, ricas en aguas geotermales, minerales y oligoelementos, son la base de una de las terapias más conocidas. Aplicadas directamente sobre el cuerpo en forma de arcilla, ayudan a mejorar el aspecto de la piel y mejoran la artritis, las inflamaciones o las varices.
Talasoterapia
Esta terapia usa los diferentes elementos del mar, juntos o por separado, como base: agua, algas, barro y otras sustancias marinas. Los centros que la ofrecen recogen el agua cerca de la orilla, la esterilizan y la calientan para aplicarla en forma de baños, duchas o chorros a presión que reducen el estrés, favorecen la recuperación vascular y la reducción de grasa corporal, entre otros beneficios.
Aloeterapia
El aloe vera en Canarias, que crece de manera natural y se prodiga bastante en las islas gracias a su clima, es de una calidad excelente. Muy beneficiosa para la piel, esta terapia alterna la limpieza corporal con leche y tónico, con un peeling, envolturas y un masaje relajante con todas las propiedades del aloe, que pone el broche de oro a este ritual
Vinoterapia
La vinoterapia es un tratamiento que aprovecha las propiedades antioxidantes de las uvas y el vino para limpiar la piel en profundidad, purificarla y nutrirla. Sus ventajas estéticas son visibles, tanto en el rostro como el cuerpo. Ya sea en forma de baños termales, envolturas o ‘peelings’, el zumo de uvas se aplica sobre la piel para aprovechar sus propiedades, de un claro efecto ‘anti-aging’.